Los silos son un tipo de vivienda subterránea única en el mundo, sólo se construían o mejor dicho excavaban en una pequeña zona de La Mancha Toledana. Pueblos como Villacañas llegaron a tener una gran parte de su población viviendo en este tipo de vivienda. Familias humildes sin dinero ni para materiales de construcción veían en este tipo de construcción una opción, para la que solo necesitaban comprar la parcela y después con mucho esfuerzo y sudor construir una vivienda.
No hay historia más romántica que la de estas gentes humildes, cuando un chico y una chica se hacían novios, como se dice por aquí, una de sus primeras misiones era conseguir dinero para comprar la parcela y una vez comprada el chico comenzaba a cavar a diario después de su ya extenuante trabajo como jornalero en el campo, para ello llevaba una vela y cuando esta se terminaba podía por fin retirarse a dormir. Su pareja tenía un trabajo si cabe más agotador aún, por la mañana con la ayuda de una esportilla sacaba toda la tierra que su pareja había picado por la tarde, de tal manera que el corte quedara limpio para seguir con la excavación. El esfuerzo de estos hombre y mujeres era colosal y una vez excavado por completo el silo la pareja podía casarse. Ampliando el número de habitaciones según sus necesidades, nuevos hijos, nuevos animales que también tenían sus propias habitaciones en el silo, era sin duda una construcción económica en lo que a materiales de construcción se refiere y apoteósica si hablamos del esfuerzo humano.
Se solía decir que los silos tenían la misma ropa de cama en invierno que en verano, ahora diríamos que son viviendas bioclimáticas, su temperatura ronda entre 18 y 22 grados tanto en invierno como en verano. El silo soporta metros de tierra sobre sus bóvedas que le dan resistencia y esta misma capa de tierra hace que el calor y el frío tarden seis meses en llegar al interior del silo, de tal manera que cuando llega el invierno llega el calor del verano y cuando llega el verano es cuando al silo llega el frío del invierno. A esto deberíamos añadir, que su impacto paisajístico aún estando en una llanura es nulo. Del suelo solo sobresalen las lumbreras, que ventilan y dan luz a las habitaciones, y la chimenea.
Es sin duda una de las joyas más únicas de La Mancha representa la esencia de nuestros antepasados, su fuerza, su pasión, su entrega y su lucha contra todas las adversidades.Desde Birding La Mancha con la ilusión prestada de nuestros abuelos y nuestra pasión por la estepa manchega nos sentimos muy felices de poder presentaros hoy «El Silo Birding La Mancha», ubicado además en plena zona de aves esteparias. Nuestros vecinos Avutardas; Sisones; Gangas; Alcaravanes e incluso la majestuosa Águila Imperial Ibérica nos visita a menudo al estar ubicados dentro de la zona de caza de dos parejas diferentes de la especie.